Polvo Bordeles 250g Caldo Funguicida

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BORDELES
x 250g

Para la correcta aplicación de Polvo Bordelés Grhesa
se deben utilizar equipos pulverizadores con agitadores automáticos
para evitar la obstrucción de las boquillas fumigadoras.

Para la correcta preparación del caldo Bordelés Grhesa
se debe colocar la dosis de polvo, ir agregando
el agua hasta que se forme una pasta espesa y luego agregar
el total de agua necesaria sin dejar de agitar la mezcla fungicida.

Plagas que se pueden combatir con Polvo Bordelés Grehsa:

Antracnosis de la vid (Sphaceloma ampelium)
Peronóspora (Plasmopara vitícola)
Sarna (Sphaceloma fawcetti)
Antracnosis citrus (Colletotrichum gloeosporioides)
Melanosis (Phomopsis citri)
Fumagina (Capnodium citri)
Torque (Taphrina deformans)
Viruela holandesa (Coryneum carpophilum)
Viruela del tomate (Septoria lycopersici)
Viruela del apio (Septoria apii graveolentis)
Antracnosis (Colletotrichum lindemuthianum)
Polvillo o Roya (Uromyces sp.)
Tizón tardío (Phytophotora infestans)
Viruela del crisantemo (Septoria leucanthemi)
Viruela del clavel (Septoria danthi)
Viruela de la violeta (Cercospora vicia)

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Descripción

BORDELES
x 250g

Polvo Bordeles Grhesa es un fungicida de acción preventiva, por lo que es recomendable su aplicación antes de la aparición de la enfermedad.

Para la correcta aplicación de Polvo Bordelés Grhesa se deben utilizar equipos pulverizadores con agitadores automáticos para evitar la obstrucción de las boquillas fumigadoras.

Para la correcta preparación del caldo Bordelés Grhesa se debe colocar la dosis de polvo, ir agregando el agua hasta que se forme una pasta espesa y luego agregar el total de agua necesaria sin dejar de agitar la mezcla fungicida.

Plagas que se pueden combatir con Polvo Bordelés Grehsa:

Antracnosis de la vid (Sphaceloma ampelium)
Peronóspora (Plasmopara vitícola)
Sarna (Sphaceloma fawcetti)
Antracnosis citrus (Colletotrichum gloeosporioides)
Melanosis (Phomopsis citri)
Fumagina (Capnodium citri)
Torque (Taphrina deformans)
Viruela holandesa (Coryneum carpophilum)
Viruela del tomate (Septoria lycopersici)
Viruela del apio (Septoria apii graveolentis)
Antracnosis (Colletotrichum lindemuthianum)
Polvillo o Roya (Uromyces sp.)
Tizón tardío (Phytophotora infestans)
Viruela del crisantemo (Septoria leucanthemi)
Viruela del clavel (Septoria danthi)
Viruela de la violeta (Cercospora vicia)
Información sobre hongos y enfermedades comunes en las plantas:

LEPRA

Enfermedad de origen fúngico que afecta al melocotonero, y que aparecen durante la primavera desde que comienza la brotación para desaparecer en verano. En primavera las hojas presentan un grosor mayor del limbo que se cubre parcial o totalmente por unos hinchamientos foliares de color claro al principio para pasar a ser rojizos después. La hoja se vuelve quebradiza y se recubre con polvo blanco al aparecer las ascas del hongo. Estos síntomas también pueden verse en los tallos de los brotes jóvenes e incluso en los frutos.

AGALLA

Es una hinchazón como vejigas de color más claro o de otro color que aparecen en las hojas. También a veces la hoja se retuerce sobre sí misma y se suelda formando una vaina. En los tallos y ramas se suelen formar bolitas que al secarse adquieren un color marrón oscuro y se puede distinguir un agujero. En las raíces aparecen malformaciones que alteran la estructura normal de éstas. Aparecen por la irritación que producen las bacterias, hongos, gusanos, ácaros, etc. La hinchazón es la forma que tiene la planta de aislar la superficie atacada, pero también es donde se protege el atacante. No son peligrosas aunque si desagradables.

TIZÓN O ALTERNARIA

Enfermedad producida por un hongo que ataca los tallos, hojas y frutas de las plantas. En las hojas se presentan pequeñas manchas circulares de color negro o pardas bien delimitadas, rodeadas a veces de un halo amarillo. Las manchas tienen la característica de tener aureolas concéntricas de color oscuro. Aparecen en las hojas mas viejas y de éstas suben al resto de la planta. Las manchas van creciendo y se van secando. A medida que la enfermedad progresa, el hongo puede atacar los tallos y los frutos si los hay. Las plantas mal alimentadas son las más propensas. Se deben hacer tratamientos preventivos.

ANTRACNOSIS

Enfermedad producida por un hongo que causa la desintegración de los tejidos, se caracterizada por la aparición de unas lesiones oscuras, hundidas, sobre hojas, tallos, flores y frutos de numerosas plantas de los jardines, bien delimitadas por una o más aureolas concéntricas, secándose posteriormente las zonas atacadas como una quemadura. Pueden aparecer rayas de color marrón oscuro en la punta de las hojas. Prosperan en ambientes cálidos y húmedos. Al dificultar la fotosíntesis las hojas se tornan amarillas y rugosas hasta su destrucción total. Ataca a especies ornamentales y también frutales como los cítricos y la vid. Se deben quitar las hojas infectadas y aplicar fungicidas antes de que aparezcan las manchas si ya se han dado otros años.

BACTERIAS

Existen numerosas especies de bacterias que atacan a las plantas. La sintomatología que producen es diversa, en general, podredumbres húmedas que despiden mal olor y manchas pardas y que matan progresivamente a la planta. Procurar que no se produzcan heridas por donde puedan entrar las bacterias (poda, rotura de ramas, grietas por el frío, provocadas por insectos, etc.). Recortar y elimina los tallos y hojas afectadas o si es necesario, la planta entera. Lo único eficaz con las bacterias es prevenir, no hay bactericidas eficaces para el aficionado, por lo que es mejor quemar la planta enferma, aunque a veces da resultado la estreptomicina.

BOTRITIS O MANCHA GRIS

Enfermedad producida por un hongo y que produce manchas parduzcas sobre tallos, hojas, flores y capullos. Estas manchas se van cubriendo de pelusilla grisácea, la planta se reseca y se llena de moho. Puede causar la muerte de plantas jóvenes y tiernas por pudrición acuosa de la base de los tallos. Se infecta por heridas, cortes de poda o grietas, tras una granizada, etc. Se recomienda aplicar un tratamiento antibotritis para evitar las infecciones en las heridas que haya hecho el granizo. Se trata como modo preventivo con criptogamicidas cúpricos: caldo bordelés, captan, zineb, benomilo. En bulbos con tulisan. Las plantas de interior más sensibles son el ciclamen, cineraria, kalanchoe, violeta africana, etc., por lo que se recomienda regarlas por abajo, poniéndolas durante un rato sobre un platito con agua. El momento de aparición coincide con humedad ambiental alta, en primavera y otoño especialmente. Las plantas más afectadas son las que tienen un follaje denso, pero también los rosales, aster, begonias, dalias, peonias, tulipanes, fresas, crisantemos, cyclamen, gloxinia, entre otras. Para evitarlo, usar tierra tratada contra hongos y procurar no mojar el follaje al regar. Es muy difícil de combatirla por la gran resistencia a fungicidas. En cuanto se note la presencia de ésta, deberá separar y quemar la plantas afectada y pulverizar con captan o thriman las demás. Sobre el terreno espolvorear con quintoceno y rastrillar para eliminar los posibles esporas. Fumigar con euparen o ronilan. Para prevenir mancozeb o benomil.

CLOROSIS O CARENCIAS

Es la decoloración del tejido foliar en las zonas situadas entre los nervios, causada bien por el suelo excesivamente alcalino, o por la falta de hierro, manganeso, zinc, cobre, boro, molibdeno, cloro, etc. Hay productos especiales para la carencia de éstos elementos. La clorosis férrica se caraceriza por las hojas amarillas, aunque esto puede ser también síntoma de exceso de riego o falta de luz solar. En la clorosis producida por el suelo alcalino, los carbonatos de cal que hay en la tiera impiden que la planta haga la función clorofílica por lo que empieza a presentar un color amarillento y le produce raquitismo. Combatirla con abonos ácidos. En casos graves administrar quelato. Otras carencias comunes son: Falta de boro hojas verdes en el centro, amarilla luego y marrones hacia el borde. Las flores tardan en abrir. Pulverizar con borato sódico y abonar con boro antes de la caída de la hoja. Falta de fósforo: las flores es donde más se acusa. Tardan en formarse y abrirse e incluso a veces se secan antes de tiempo. Abonar después de la floración con superfosfato de cal. Falta de nitrógeno: las hojas empiezan a tomar un color verde amarillento, y son pequeñas y débiles. Aplicar un abono nitroso. Falta de magnesio: las hojas amarillean y presentan manchas marrones. Pulverizar con sulfato de magnesio diluido al principio, para más tarde cuando la planta está en reposo abonar de nuevo. Falta de potasio: los bordes de las hojas se doblan, son pequeñas y toman un tono pardo. La enfermedad va subiendo por la planta. Para combartirla usar sulfato de potasio pulverizado y cloruro de potasio como abono.

SUPURACIÓN O GOMOSIS

Enfermedad producida por un hongo muy resiste al frío, por lo que su desarrollo es posible en pleno invierno, si la humedad es la adecuada. Afecta sobretodo a las drupáceas. Sobre las hojas las esporas caen en el pedúnculo y provocan su desecamiento y la caída de la hoja. Si caen sobre el limbo forman una mancha redonda violácea rodeadas por un halo claro que se vuelve después rojizo y que se transforma después en un agujero, produciendo necrosis. También en las ramas se detectan estos síntomas, secando las puntas. A veces la corteza se rompe y deja salir lo que se llama goma o gomosis.

CHANCRO

Es producido por un hongo que se introduce en la planta por cualquier herida (poda, grietas, cicatrices, etc.). Provoca una mancha en el tronco, ramas o renuevos, los cuales provocan un anillamiento impidiendo así la circulación de la savia, dando como resultado la muerte de brotes o ramas por encima de la lesión, pudiendo observarse en los árboles afectados puntas secas emergiendo de los pies frondosos. Se nota un abultamiento que levanta la corteza por donde podemos ver la herida. El chancro del castaño es uno de los más conocidos. Es recomendable la desinfección posterior a la poda y de las heridas de corteza.

ESCLEROTINA

Podredumbre blanda y acuosa, que no desprende mal olor, a diferencia de las bacterias, que sí desprenden mal olor. Se observa un micelio blanco algodonoso y puede darse en tallos, hojas y frutos hasta 1,5 m. de altura del suelo. Es muy común verlo en vegetales de hoja blanda como la lechuga.

FUSIAROSIS

Es una putrefacción negra de progreso lento, que atacan las raicillas de la planta produciendo amarilleo y marchitez de hojas. Es difícil de erradicar. La fusiarosis es un problema mundial en los cultivos, es muy conocida en granos de la espiga del maíz, trigo, cebada, etc. Se presenta como una decoloración de espiguillas individuales que se tornan blanquecinas.

MAL DEL PLOMO

Enfermedad muy grave causada por un hongo que deja el follaje de color plomizo de ahí le viene su nombre. El limbo se encrespa y marchita y la planta pierde vigor y a veces llega a morir. Ataca en especial al melocotonero y ciruelo.

MANCHAS FOLIARES

La presencia de manchas no siempre es por parásitos, a veces la luz solar quema las hojas, también un riego excesivo. Si no es ninguna de estas causas, son manchas causadas por hongos especialmene cuando la tierra está húmeda. Es un síntoma de enfermedades fúngicas como la antractnosis, alternariosis y septoriosis.

VERTICILOSIS

Afecta sobre todo a la vid, frutales, girasol y frambuesa. Los síntomas son: marchitamiento de los brotes al igual que de las hojas, el cual es más intenso en épocas de calor. Produce clorosis, desecación y necrosis en parte de la planta. Eventualmente la planta puede morir parcialmente, pero puede volver a brotar de las raíces, ya que éstas no están siendo atacadas. Ataca al tejido vascular y para detectarlo hay que levantar la corteza y ver las estrías de color rojizo-café

SEPTORIOSIS

Enfermedad provocada por unos hongos microscópicos que afecta a muchas de las plantas compuestas ornamentales como crisantemo, margaritas, aster, etc. Está favorecido por la humedad tanto del riego como del aire. Aparecen manchas pardo-negras en las hojas y provocan el reblandecimiento de tejidos. Los síntomas se detectan también en los brotes tiernos y tallos de las hojas. Eliminar las hojas enfermas y tratar con un fungicida sistémico (Carbendazim, Benomil) y repetir el tratamiento a los 15 días. En las hortalizas cultivadas por sus raices, suele dañar especialmente al apio. El período de mayor riesgo es a finales de la primavera.

ROYA

Pequeñas manchas de color pardo claro hasta oscuro causadas por el hongo que ataca a las partes verdes de las plantas, llamadas pústulas. Con el ascenso de las temperaturas empieza a manifestarse, ya que le favorecen el calor y la humedad. Los geranios son uno de los que más lo sufren, también el clavel, crisantemo, rosal y prímula. Se combate con lo mismo que el mildiu y benomilo. Fumigación preventiva con oxicloruro de cobre.

REPILO

Hongo que produce una enfermedad que provoca una intensa defoliación de los olivos, con el consiguiente debilitamiento y disminución de la productividad. Aparecen en las hojas unas manchas circulares de tamaño variable y color oscuro, que al poco tiempo son rodeadas por un color amarillento hasta la zona central de la mancha. Después las manchas vuelven a oscurecerse. La lesión se presenta también en un tono blanquecino.

PUDRICIÓN DE LA RAÍZ

Son varios los hongos que pueden atacar a las plántulas de semilleros o a adultas provocando lesiones en la raíz y otros tejidos, que parecen licuarse. La primera señal es que las hojas se ponen amarillas y se marchitan, volviéndose a continuación marrones. La planta termina muriendo puesto que se pudren las raíces y la base del tallo. Son propensas las plantas que requieren pocos riegos como los cactus o violeta africana. Se pueden hacer tratamientos químicos aplicando alrededor del cuello, benomil, pero no es muy eficaz, también se trata con zineb, captan. Siempre es recomendable la disminución de agua, el drenado del exceso y el acondicionamiento de la tierra para evitar que las raíces se encuentren sumergidas en agua. Complementar el compuesto de suelo con arena suele ayudar a evitar el exceso de humedad.

MILDIU

Este hongo muy peligroso para las solanáceas produce en la parte inferior de las hojas una pelusa blanco-grisácea y en la superior manchas amarillas, que se hacen grandes y oscuras. En los frutos pequeños produce manchas grisáceas y marcescentes. Requiere calor y ambiente húmedo. La época más propicia es el verano, por lo que se recomienda no usar la aspersión para el riego. Se combate con zineb, maneb, captan, benlate o caldo bordelés en aplicaciones con frecuencia quincenal.

FUMAGINA o NEGRILLA

La fumagina se puede entender como una enfermedad provocada por hongos pero favorecida por la existencia de plagas. Por este motivo la acción contra ella debe ser doble. Hemos de eliminar la plaga paralelamente al combate de este hongo.

La fumagina, también conocida con negrilla, es un hongo que se desarrolla sobre las excreciones de melaza de insectos como los pulgones y las cochinillas. A esta melaza también acuden las hormigas y las avispas por lo que no es difícil encontrar árboles y arbustos con fumagina y estos insectos juntos.

La fumagina se presenta como una especie de polvillo o alquitrán negro sobre las hojas. El principal daño no es directo sino indirecto. Realmente no perjudica a ningún tejido de la hoja directamente sino que al desarrollarse forma una película tan opaca que no deja pasar ni la luz ni el aire provocando la caída prematura de las hojas además del antiestético color y sustancia sobre todo el árbol, tanto sobre las hojas como sobre el tronco y ramas.

OIDIO O MANCHA BLANCA

El oídio se manifiesta con la aparición de una capa de polvillo blanco, en especial sobre las hojas, que quedan deformadas y son más pequeñas de lo normal. A veces aparecen también unas manchas claras. Las flores afectadas no se desarrollan; los frutos presentan deformaciones y manchas como de herrumbre. Es una enfermedad criptogámica que ataca sobre todo a las plantas ornamentales, y que es de las más fáciles de erradicar aunque lleve bastante tiempo la planta afectada. Son parásitos superficiales que forman sobre tallos, hojas, flores y frutos un tapiz blanquecino de aspecto algodonoso o pulverulento y que aparecen como manchas blancas, incluso en algunas especies como rosales las cubre de moho blanco como si fuera harina. A la larga la planta empieza a amarillear y muere. Cuando está completamente arraigada y que coincide por lo general en otoño, sobre estas manchas aparecen puntos negros que son los aparatos fructíferos del hongo. El oidio necesita muy poca humedad ambiental para su desarrollo, lo que sí necesita es calor por lo que la primavera y sobre todo el verano es la época más peligrosa, aunque soporta también el frío. Prefiere los climas secos, pero ataca en las épocas de mayor humedad. Entre las especies más atacadas del jardín están los claveles, crisantemos, dalias, violetas, geranios, zinnias, lilas y rosales. Entre los árboles podemos encontrar la catalpa, el plátano de sombra, magnolio y lagerstroemeria. Hay fungicidas de contacto, como el azufre en polvo (acción tópica) y fungicidas sistémicos como el Carbendazim (acción penetrante o sistémica).

El polvo bordeles no es un insecticida. En caso de presencia de insectos se debe complementar el tratamiento con un producto específico para el tipo de plaga.

Polvo Bordeles es un producto de Laboratorio Grhesa.

Información adicional

Peso 0.270 kg
Dimensiones 10 × 14 × 5 cm